LA FACULTAD DE LA COSERÍA - Microrelato compartido

 

LA FACULTAD DE LA COSERÍA

—Rolando José Di Lorenzo-Ana María Caillet Bois

—La oscuridad crea monstruos y horrores, a la noche se le atribuyen las brujas, los demonios y las muertes.  Por otra parte los románticos hablan de la oscuridad del amor, el romance, los besos y las promesas, tendremos que ponernos de acuerdo—Decía ofuscado el Doctor Fermín Chemento, en medio de una disertación en el Aula magna de la facultad de La Cosería (facultad que descubre, analiza y explica las cosas) Un aplauso cerrado y algunos de pie, acompañaron las palabras del facultativo, solo dos o tres enemigos acérrimos de Chemento, permanecían sentados y con los brazos cruzado.

—alguna pregunta, dice el Doctor Chemento mirando fijamente y con cara de pocos amigos a los insurrectos. ¿Cómo se atreven a enfrentarlos de ese modo?

Odiaba los debates porque el daba las dos opciones y que cada uno se las arreglara, sino la conferencia se convertía en un Chimento y él se llamaba Chemento-

Los enemigos comenzaron con preguntas muy interesantes que hicieron que la gente que estaba parada se sentara nuevamente. El  Doctor Fermín Chemento, muy a pesar suyo, se paró frente al auditorio a escuchar.

—Doctor chemento comenzó uno de los enemigos, no me quedó claro cuál es la opción a la que usted adhiere o dicho más claramente, ¿para usted la noche trae los monstruos o el romanticismo?

Mire, le voy a contestar en forma práctica, cuando me encuentro con personas como usted que preguntan idioteces usaría la noche para hacerlo pedazos en este mismo momento, pero están las luces prendidas, el auditorio está lleno de gente  y yo iría preso por un ser tan insignificante, en  cambio si usted se hubiese levantado callado la boca yo estaría gozando de una cena romántica a la orilla del mar.

Sin decir otra palabra el Doctor Chemento tomó sus libros y enfiló hacia la salida cuando escuchó al ser insignificante  que le decía

—Corra  Doctor, porque quien está esperándolo para una noche romántica a la orilla del mar es mi señora y le aseguro que lo voy a alcanzar.