YASTO

Maracaibo, no, Venezuela no, aquí, un bar, aquí en Necochea, nuestro bar, no era de Tito. Miguel, Ivano, yo Asti Gancia, quien se acuerda! Carlitos, Lucio, Armando, yo Champagne, no se cual era Julio, Jean, a veces yo Julio y yo, muchas veces Martinis, Scotch on de rock. Negros semidesnudos bailando, Pintados en sus paredes, se oían los sones de los bongos se sacudían las palmeras al viento. Era entonces el lugar Estaban conmigo aun, el Colorado, el Luckie, todavía, el Kent. Siempre estaba el swing, estaba el jazz, estaba Frankie. Allá adentro, allá lejos siempre. Siempre… Ya no, hace mucho que fue. Hace mucho que no esta Hace mucho

No sabía que con el paso del tiempo, lo que mas iba a notar y sufrir, eran las ausencias, las distancias no acortadas, los tiempos sobrantes, los espacios no ocupados, seguramente habré oído a algún viejo decirlo, contarlo, sufrirlo pero no debo haber tenido el tiempo para escucharlo y aprender. No es fácil, siendo joven y muy ocupado, detenerse a escuchar a los que sienten que el paso del tiempo, no es solamente verse crecer canas, arrugas en la cara, o molestias en las articulaciones. Son las pérdidas las que realmente hacen sufrir. Ver que por el camino se nos han ido cayendo, proyectos, tíos, ilusiones, amigos, bienes, padres, Esas pérdidas irremediables, esperadas o no, injustas siempre, son las que dejan esos espacios vacíos, esas distancias enormes, esos tiempos desocupados. Y no hay nada peor, que tener el tiempo y no tener nada que hacer con el, tener los espacios y no poder ...

De nuevo la esperanza, El amor hizo su juego Cuantas veces tiró dados Cuantas cartas sacó Y al final volvió a ganar Se movieron en el tablero arriba, abajo y otra vez fichas o estrellas igual es escribieron tu destino y de nuevo la esperanza Que misterio nos rige Que camino encadenado Te dijo otra vez, otra vez, Y de nuevo la esperanza La vida ronda tu vida. Sola la vida puede y el amor solicito las sigue juegan ambos día a día, el destino y el futuro y de nuevo la esperanza La vida yo no te ronda. La vida ya esta adentro. ( Para Nati ) 13 mayo 2009

“La perfección de los momentos siempre estarán acompañados de recuerdos, sin ellos es como si no hubiéramos vivido” Julio, 3 de diciembre 2005

Cuantas veces la vida te hace esto, al cabo de un corto periodo, te ves revuelto, envuelto, lleno, vacío, arriba, abajo, un viento incontrolable, un tornado que nos saca y nos pone de nuevo en el mismo lugar, pero totalmente cambiados, si, nosotros y el lugar. Porque una vez que pasa esta huracanada vida, nada es igual, todo es nuevo, es peor, o mejor, pero distinto y lo que nos cuesta aprender que es realmente distinto, que nosotros somos diferentes a ayer y luego tratar de resolver el nuevo problema, como hacemos con esto que nos quedo, como seguimos, porque lo que sabemos es que no volveremos, quizá simplemente porque no se vuelve. Solamente se vuelve con las emociones, con los sentimientos, con los recuerdos y con la nostalgia, solo así nos reconocemos volvedores y ese paseo por el pasado, esos recuerdos, nos ayudan a seguir con lo que nos quedó. Pero hay que seguir, porque no estamos solos y esos que están con nosotros son lo mejor que tenemos, lo bueno que nos fu...

Llueve Llueve y llueve, como antes te acordas? Si, como antes, cuando éramos chicos, o adolescentes, o como ayer, que éramos casi como hoy aunque distintos, porque nunca somos iguales, la última gota que cayo me hizo distinto, me cambió y llueve sobre la lluvia, para cambiarme, o para que me de cuenta de que he cambiado, cuantos he sido desde que llovió la primera vez, tantos como gotas de lluvia cayeron? Solo se que sigue lloviendo y yo aquí, esperando, tal vez a vos, tal vez a mi, tal vez al que seré o a la que serás, pero se que nunca a los que fuimos, porque somos otros. Me lo dice hoy la lluvia, ayer me lo contó el viento y antes el mar, todos me dicen lo mismo, mira que has cambiado, fijate que no sos el mismo, no sos el mismo amigo, no sos el mismo amante, aunque siempre a tu lado este ella, tu vieja amiga, tu vieja amante, sos y son distintos, fíjense bien, porque deben ser mejores, mejores que ayer, mejores que hace un rato, cuando cayó la última gota de llu...

Reflexión de un amigo. Estuve en Paris durante unos pocos días, pero me bastaron para conocer su más sorprendente secreto: Paris no existe. No es una ciudad. Es en realidad un sueño, un maravilloso sueño al que podemos asomarnos solo si hemos deseado mucho conocerlo. Si mil veces nos hemos imaginado caminando sus calles. He descubierto también que es un sueño que tiene magia. Sus visitantes no lo saben pero al terminar su estadía pueden recibir un hechizo. Si en la cima de la Torre Eiffel han sentido que no querían bajar, que querían quedarse contemplando la ciudad hasta la puesta del sol, permaneciendo toda la noche frente al reflejo de sus luces y maravillarse viendo el amanecer al día siguiente. Si dentro de la Catedral de Notre Dame no pudieron evitar que por la emoción unas tímidas lagrimas les humedecieran los ojos. Si caminando por la ribera empedrada del Sena se sintieron ya formando parte de su historia. Entonces quedaran atrapados por la magia de Pari...

Y se termina el vino de la copa, pero no está bien seguir, caminar hasta el pequeño bar, elegir otro vino, pesado, con mucho roble, un cabernet viejo y amigo. Todo tiene su límite, hasta aquí está bien, pero la música sigue. Y es un buen momento, porque los momentos son tan distintos, tan distinta es la vida de un día para el otro, por estar llena de momentos, aunque hay algunos de ellos que nos llenan la vida, así de repente, sos distinto, sos otro, por eso el momento es este y no otro. Y la música sigue Cuantos años pasaron desde que yo bailaba esto, en esas noches iguales, iguales a otras noches iguale. Pero tengo un viejo juego con el tiempo, el me hace creer que aquellas noches iguales a otras noches iguales, fueron esplendorosas, únicas y yo le creo y le creo tanto que siento nostalgias de lo que en realidad no fue. Por eso el, se aparece de repente, viene escondido detrás de una canción, de un perfume, de una foto y me sorprende con un grito y sigo el ...

Y fue al comienzo del día cuando rompió la mañana, tu panza se hizo pesebre y alojó al amor. Y cantó ese día el poeta “noche de las nueve lunas tráelo…” y respondió el otro enseguida “ si la viera usted, cantándose canciones de cuna, como un cascabel….” y se llenaron tus huecos de flores y tus cavernas de pájaros en el comienzo del día de aquella mañana primera. En que estrella habrá que pensar que está escrito su destino, no se, entre tantas, El Principito sabrá que las conoce de cerca Será en una chiquita, distante, como el planeta del farolero, será donde vive su flor aquella rosa tan rosa que lo llevó por amor. Desde el comienzo del día de aquella mañana primera estas tejiendo en secreto y con amor escondido aquella eterna cadena de los seres y el destino.